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Alberto Esquer destaca la vida y obra de José Clemente Orozco

Conmemoran frente al monumento erigido en su honor, el aniversario 132 de su natalicio

lunes, 23 de noviembre de 2015

Para contar la historia de Zapotlán el Grande a las nuevas generaciones, se debe empezar por sus hijos ilustres, aquellos que dejaron huella de su existencia gracias a su talento. La obra de José Clemente Orozco, zapotlense de nacimiento y universal por admiración, fortalece la identidad y sirve de ejemplo para los ciudadanos.


Frente al monumento erigido en honor del muralista zapotlense, autoridades del Ayuntamiento de Zapotlán el Grande, encabezadas por el presidente municipal, Alberto Esquer Gutiérrez le rindieron tributo por el aniversario 132 de su natalicio y colocaron una ofrenda floral, en compañía de los alumnos de la “Escuela Primaria José Clemente Orozco”


El primer edil destacó la inteligencia y personalidad que identificaban al Hijo Ilustre de Zapotlán, el esfuerzo que caracterizó su trayectoria y sus creaciones que plasmaban la mexicanidad e historia nacional. 


“Es importante reconocer sus estudios y esfuerzos invertidos para llegar a convertirse en un gran pintor y muralista; hombres como él representa para los ciudadanos un ejemplo de esfuerzo y dedicación, pintor que con su empeño logró reconocimiento internacional”, añadió el presidente municipal. 


Durante el evento, los alumnos cuarto y quinto grado de la “Escuela Primaria José Clemente Orozco,” declamaron una poesía en honor a quién diera el nombre a su institución.


Entre los trabajos más destacados del pintor zapotlenses José Clemente Orozco, resaltan los murales que realizó en el Hospicio Cabañas, en la ciudad de Guadalajara, donde pintó 53 imágenes que plasman el encuentro entre la cultura española e indígena; sobresaliendo el “hombre en llamas” que representa al mundo prehispánico y sacrificios humanos. 


En 1922, plasmó algunas de sus obras en el edificio de la Escuela Nacional Preparatoria, en la Ciudad de México; donde pintó “La Trinidad”, “La Trinchera”, “La destrucción del viejo orden”, “Los aristócratas”, “Cortés y la Malinche”,  obras que representaban el mestizaje e historia de México. Entre los años de 1927 a 1934 radicó en Estados Unidos, oportunidad que le permitió plasmar el mural “Prometeo” en la New School For Social Reserch de Nueva York. José Clemente Ángel Orozco, falleció el 7 de septiembre de 1949. 



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